Crónica 3 - Meet... 'The Who'

Se dice que cada inicio es difícil, que el acercarse a un nuevo contexto y conocer gente nueva puede ser una experiencia de distintos matices y, honestamente, comienzo a creer que no es del todo falso. 

A lo largo del recorrido por el barrio de Bella Flor y la estadía en el sitio he llegado a conocer no solo a los niños que nos han acompañado, sino también a las personas que se preocupan y se interesan por lo que allí hacemos.

Una de estas personas es el señor Orlando, él es uno de los catequistas de la parroquia, quien nos ha ayudado a lo largo de toda la práctica, es quien nos da las llaves del edificio, nos ha explicado cómo se abren los registros del agua, también quien – muy amablemente – nos deja el refrigerio para los niños. Además, se ha mostrado pendiente sobre lo que hacemos, nos comenta sus opiniones y también ha compartido, en ocasiones, cosas sobre su vida, como se siente, que le motiva y lo mucho que le enorgullece su hija, Luz. Es agradable escucharle hablar de su día y sobre las fallas que ve en la educación en el lugar, lo triste de ello es saber que quienes más le han decepcionado han sido los profesores y como ejercen su labor en el colegio, deja mucho que considerar…

Siguiendo con la travesía que nos ha aventurado la práctica social, se han unido – hasta la fecha – un total de doce entusiastas niños y niñas que cada sábado que nos encontramos sorprenden con alguna frese, una creación o un recuerdo que puede ir desde las carcajadas hasta el cuestionamiento sobre todo lo que se cree.

Si, es cierto, no todos los días vienen todos, pero es como si se turnaran, algunos días van unos, otros días van otros, pero sin importar que suceda sabemos que podemos contar con mínimo dos de ellos para hacer los encuentros.

Los primeros niños que llegaron a ser parte del espacio, y han continuado viniendo a los encuentros fueron: Jean Poll, Talía, Luz y Nicole.

Talía, tiene 12 años y es hermana de Jean Poll. Ella, es muy activa y participativa en lo que se proponga, si bien mantiene una actitud distante y callada en algunos momentos – sobre todo al inicio cuando nos estábamos conociendo – es simplemente porque desea hablar con alguien sobre algo muy específico, con ella todo es muy tranquilo y es una gran chica, pero solamente te comentará algo si le preguntas primero o si ve que de verdad te interesas por ello. Y, no está de más decir, que todo lo que implique actividad física es de sus cosas favoritas, pero lo mejor es verle en los momentos en los que se permite ser todavía una niña y no se le ve pensando en otros pendientes.

Jean Poll, es un caso – en el buen sentido –, es un niño demasiado enérgico quien puede estar de lo más concentrado en la actividad que se esté llevando a cabo y de repente pasar dispersar la atención en algo totalmente diferente y llamar la atención para que todos pasemos a prestarle atención a ese momento, puede ser divertido en momentos, pero lo que debe negociarse es la vuelta al centro de la actividad, ¿Cómo retomamos?, ¿Cómo ponemos atención a los otros? Con él se está reflexionando en el hecho de valorar y respetar el trabajo de otros como los demás lo han hecho con el propio.

Luz, es la hija de don Orlando y tiene la misma edad de Talía. Es bastante amable con las personas que le rodean y siempre trata de dar el máximo de amor posible a quienes tiene a su alrededor, a nosotros nos recibe con abrazos y con los amigos que ha hecho en el espacio es colaborativa en las cosas que pueda ayudarles, está pendiente de ellos y siempre trata de inspirarles confianza cuando ve que puede haber dificultades. Además, tiene un gran talento por el dibujo y le apasiona el arte japonés.

Y, de este primer grupo, Nicol, una niña dulce y callada al inicio, pero que se ha ido desenvolviendo a medida que agarra más y más confianza con nosotros, ha demostrado un gran gusto por los animales, las matemáticas y, sobre todo, con las manualidades, todo lo que tenga que ver con crear o utilizar el cuerpo la motiva y le sirve como apoyo para integrarse más con todos y ser más expresiva. Ha sido muy bonito ver cómo ha pasado de decir una que otra palabra en los encuentros a que ya hayamos construido una red de seguridad bastante sólida en la que se siente con la bastante confianza para expresarse y saber que valoraremos su opinión e incluso algunos podamos llegar a compartirla.

A estos chicos, les siguieron Shadday, Melanie, Breiner y Ángel.

Shadday, es una niña muy segura y comunicativa – le da balance al grupo –, también es bastante activa y participativa, pero más que eso lo que más le gusta es explorar y uno de sus deseos más grandes es ir a conocer París algún día, ver el mundo e imaginarse volando es de lo que le gusta hablar pero su mayor admiración es la torre Eiffel, habla como su hermana le enseña cosas en otros idiomas y le habla acerca de lo que podrán hacer cuando lleguen a viajar al extranjero, y mientras tanto habla acerca sobre su gusto por los deportes y la lectura.

Melanie es la niña más pequeña con la que hemos estado en este espacio y es demasiado activa, tiene una actitud de muchas revoluciones y si tienes algo planeado seguramente se sentirá con la confianza para proponerle algo más a esa experiencia. Pero, sobre todo eso le fascina tener la libertad de manipular diferentes materiales, ensuciarse y crear cosas que puede terminar siendo un millar de cosas más. Si debo ponerlo en palabras, ella tiene imaginación de sobra para todos nosotros.

Breiner es un chico que es callado, pero que le gusta realizar actividades de escritura, dibujo, y básicamente cualquier cosa que no requiera de mucha activación física. Con él, ha sido un poco complicada la parte de establecer una red de confianza por lo que no cuenta mucho y cuando se encuentra mal, sea porque esta triste o enfadado, lo reprime y no comenta mucho; sobre esto hemos tratado con varias estrategias y hemos logrado hablar un poco más con él, conocerlo algo más y, en lo que se ha abierto con nosotros, ha comentado lo mucho que le gusta pintar (con pinturas o marcadores, no le gusta el lápiz) y los dinosaurios. A parte de eso, estamos trabajando en maneras de lograr que desee integrarse al grupo, hacerse parte de los círculos de actividades con otros, sentirse un poco más libre de ser parte en la experiencia y acompañarle en el proceso de crecer y crecer con otros.

Ángel es un chico muy abierto con las cosas, si le preguntas que no le gusto o en que podrías cambiar la actividad estará dispuesto a darte su opinión, y lo mejor de todo es que lo hará con el mayor respeto posible. Pero cuando hablamos de habitar las experiencias es el primero que estará listo para la nueva aventura, y en toda la energía que tiene también es de los primeros que acabará dejándote con que utilices el plan a, b y c con el mientras los otros habitan el momento de maneras y ritmos diferentes.

Los últimos chicos que se han integrado a los espacios han sido Samara y Gerard.

A Samara la definiría como la hermana mayor, es una niña de 10 años bastante centrada y cariñosa que se preocupa por su hermano pequeño Gerard. Pero además de eso, es muy curiosa y pregunta que tenga sobre cualquier cosa que le venga a la cabeza pregunta que te hará si te tiente la suficiente confianza, por lo que el tener, no la respuesta a la pregunta que te haga, sino una manera ingeniosa de seguir alimentando su curiosidad y poder darle herramientas para que ella misma vaya encontrando sus respuestas es clave en los encuentros.

Gerard es de los menores del grupo, junto con Melanie, un niño que adora jugar con el material que estes dispuesto a darle y a explorarlo con él. Es bastante observador y busca encontrar diferentes maneras en las que se pueda usar alguna cosa, además, suele compartir lo que hace con otros, por lo que si descubre algo es muy posible que te lo cuente con el mismo entusiasmo que lo descubrió.

Finalmente, Juan Pablo y Santiago. Sobre Juan Pablo puedo contarles que en el primer encuentro que tuvimos se mostró muy entusiasmado al hablar sobre la tecnología y su juego favorito, Free Fire. Y Santiago, compartió con nosotros un experimento y una simulación de compras y ventas, se vio emocionado y participativo durante las experiencias.

Si, lo sé, es algo vaga la descripción de aquellos dos niños y realmente me gustaría poder decir algo más, pero solamente nos acompañaron a una sesión. Las razones por las cuales se debe esto las desconozco y sería muy bueno conocerlas, quizá ayudaría a mejorar en lo que nos encontramos haciendo o nos daría herramientas para abordar otras temáticas que también puedan resultar interesantes para todos.

Pero bueno, por ahora puedo decirles que ha sido algo genial llegar a conocer y compartir un espacio con estas increíbles personitas que nos regalan el tiempo de las mañanas de sus sábados para pasar tiempo y adentrarnos en distintas aventuras.

Porque lo mejor es que en estos espacios crecemos todos.

-A.g.-